Seguro de decesos
¿Qué es un seguro de decesos?
El fallecimiento de un ser querido siempre es un momento difícil. Al duelo y a la pena se le suman una serie de obligaciones y trámites legales que complican aún más la situación. Muchas de estas gestiones llevan además asociado un importante desembolso de dinero. Gracias al seguro de decesos, el asegurado puede liberar a sus familiares de las cargas económicas y organizativas vinculadas al sepelio.
¿Para qué sirve un seguro de decesos?
En el ámbito de los seguros existen productos especializados en ofrecer coberturas en caso de fallecimiento. Uno de los más populares es el seguro de decesos, destinado a cubrir los gastos que generan los servicios funerarios, el entierro o incineración.
Sin un seguro de decesos, los gastos derivados del sepelio se sumarán a otros pagos como el de las obligaciones fiscales y tributarias vinculadas al fallecimiento, por ejemplo, la aceptación de una herencia. La suma de todos estos desembolsos puede comprometer la solvencia de los familiares del difunto en un momento especialmente sensible en todos los sentidos.
El seguro de decesos sirve para liberar a los familiares de todas esas cargas económicas. Es, por lo tanto, un tipo de póliza familiar que beneficiará a todos los miembros del núcleo más cercano del asegurado en el momento de su fallecimiento.
¿Cuál es el mejor seguro de decesos?
Para conseguir un buen seguro de decesos no es necesario realizar una gran inversión: incluso los seguros básicos ya ofrecen suficientes coberturas para que los gastos por el fallecimiento de una persona no se conviertan en un desembolso inasumible por la familia.
Pero si se busca otro tipo de facilidades durante los trámites funerarios y después de estos, se puede optar por seguros de decesos con coberturas más ampliadas entre las que destacan:
- Planificación íntegra del funeral
- Repatriación y traslado a cualquier punto de España
- Asistencia jurídica y psicológica
- Facilidades para incluir a varios asegurados en la póliza, incluso a niños pequeños
- Devolución del capital sobrante
¿Qué cubre un seguro de decesos?
La contratación de un seguro de decesos es el modo más sencillo de no dejar ningún cabo suelto. Este tipo de pólizas facilita a los familiares la resolución de todas las gestiones y trámites funerarios asociados al fallecimiento de un ser querido:
1. Tanatorio y servicio religioso
El sepelio siempre implica traslados y los traslados se realizan en ataúd y coche fúnebre hasta el tanatorio, el cementerio o crematorio. Las distancias recorridas y la zona geográfica incrementan o reducen el precio de estos servicios de manera sustancial. En la póliza también se recoge el tipo de ceremonia escogido, así como la decoración de la sala en la que se desarrolle (velas, ramos, coronas de flores, catering…). Incluso es posible obtener cobertura para la publicación de esquelas.
2. Sepelio
Con independencia de las cuestiones religiosas, en España existen dos modalidades de sepelio contempladas en los seguros de deceso:
- Incineración: cremación y entrega de cenizas a la familia con posibilidad de depositarlas en un columnario (nicho para urnas).
- Inhumación: depósito del ataúd en una sepultura o en un nicho. El lugar de la inhumación puede ser en propiedad (unidad de enterramiento individual o familiar) o un alquiler temporal.
Incluso los seguros de decesos más básicos incluyen el coste del ataúd o de la urna hasta los límites acordados en la póliza.
3. Trámites administrativos
Es otra de las grandes ventajas de disponer de un seguro de decesos: olvidarse del papeleo. La aseguradora ofrece asistencia a la familia en la realización de todos los trámites y gestiones necesarias para el cumplimiento de sus obligaciones legales y tributarias: aceptación de herencia, pago de impuestos, tramitación de pensiones, altas y bajas en organismos públicos, etc. De esta forma, la familia se asegura esta tranquilidad durante los días más complicados.
¿Qué hay que tener en cuenta a la hora de contratar un seguro de decesos?
Antes de contratar un seguro de decesos es importante que el tomador valore los servicios que considere más necesarios para sus familiares, el tipo de despedida que desea y la forma más conveniente de ir abonando la prima. Para ello recomendamos prestar atención a estos tres aspectos:
1. Tipos de prima
Teniendo en cuenta que la edad del tomador es uno de los aspectos más significativos en el momento de la contratación de una póliza de decesos, las compañías aseguradoras ofrecen diferentes tipos de prima:
- Prima natural: el precio se renueva anualmente con la edad del tomador. A partir de los 50 años puede suponer un 10-15 % más cada año.
- Prima nivelada: se mantiene un precio fijo desde la suscripción de la póliza y se mantiene el derecho de antigüedad.
- Prima mixta: el precio va aumentando con el tiempo y se queda fijo a partir de los 60-70 años.
- Prima única: abono de todo el seguro en un único pago (normalmente, para tomadores de más de 70 años).
2. Capital asegurado
Es el dinero que recibirán los familiares o herederos del fallecido para hacerse cargo de los gastos funerarios. Dicho capital aumenta en el caso de las primas naturales, que también se incrementan con la edad, y se mantiene fijo en las primas niveladas. Si tras sufragar todos los gastos del sepelio no se ha consumido todo el capital asegurado, los herederos podrán reclamar el dinero sobrante, con la obligación de tributar por él en el Impuesto de Sucesiones.
3. Servicio de atención psicológica
No se incluye entre las coberturas de los seguros básicos, pero es un servicio cada vez más demandado por los clientes. La atención psicológica, especialmente en fallecimientos que se han producido de forma traumática, resulta fundamental para ayudar a la familia a recuperar su vida normal tras pasar por una situación emocional especialmente sensible.
¿Cuánto cuesta un seguro de decesos?
En España, el precio medio de un entierro se sitúa en torno a los 3.700 euros. Pero dependiendo de la localización, la necesidad de traslados y el tipo de ceremonia, esta cifra puede aumentar hasta los 6.500 euros.
La incineración siempre supone un desembolso algo menor que el entierro y el ahorro de un nicho, tumba o mausoleo. No obstante, también implica gastos de tanatorio, ataúd y cremación. El coste medio se sitúa cerca de los 3.600 euros.
Teniendo en cuenta estos precios, es fácil entender por qué resulta tan ventajosa la contratación de un seguro de decesos incluso en la modalidad más básica. El coste medio de estos productos va de los 15-50 euros anuales hasta los 40 años; entre 40-90 euros anuales a partir de los 50 años y de 120 a 230 euros anuales a partir de los 60 años.
¿Cómo se calcula un seguro de decesos?
Los precios de estas pólizas pueden variar mucho de una aseguradora a otra ya que existe un alto grado de personalización. Con todo, siempre se realizan los cálculos sobre las mismas variables:
- Edad del tomador del seguro: no es lo mismo contratar un seguro de decesos durante la juventud que a edades ya avanzadas, cuando el riesgo de fallecimiento es mayor y, en consecuencia, las primas son más elevadas. Para equilibrarlo, los seguros de decesos ofrecen la modalidad de prima nivelada que mantiene la antigüedad de la póliza. Así, aunque inicialmente se pague más cuando aún se es joven, el precio del seguro se mantendrá fijo de cara a la vejez.
- Lugar de residencia/prestación de servicios: los costes funerarios difieren mucho de una región a otra. Por este motivo, en el momento de contratar un seguro de decesos se debe especificar el lugar donde se prestarán estos servicios llegado el momento. Junto con el lugar de residencia habitual, será también un factor decisivo a la hora de determinar el coste de eventuales traslados.
- Servicios contratados: una póliza de decesos básica solo suele incluir servicios elementales como ataúd, coche fúnebre y las ceremonias religiosas o civiles correspondientes. Si se opta por servicios ampliados, la aseguradora podría correr además con gastos de repatriación del fallecido, asesoramiento administrativo y psicológico para los familiares o conservación del ADN y borrado de la vida digital.
¿Cómo contratar un seguro de decesos?
Actualmente, la mayoría de las compañías aseguradoras ofrece al cliente la posibilidad de consultar online las características de sus pólizas de decesos. Cada aseguradora incluye sus propias condiciones o limitaciones, por lo que conviene contrastar las ventajas y desventajas de cada una.
En Aseguramos Online te ayudamos a escoger el seguro de decesos más adecuado. Para ello solo debes rellenar el formulario de nuestra web y te enviaremos por email una oferta comparativa con las coberturas y precios que ofrecen las principales compañías aseguradoras de España.
Este es el modo más sencillo de disponer de información actualizada en cualquier momento y de filtrar la búsqueda del mejor seguro de decesos en función de tus necesidades. Solo necesitas unos minutos para solicitar una comparativa de seguros de decesos clara y organizada que te permita tomar la decisión más acertada.
¿Dónde contratar un seguro de decesos?
Ni siquiera tienes que moverte de casa. Para contratar un seguro de decesos basta con disponer de un ordenador y unos minutos para realizar todos los trámites. Después de que le hayas dado un repaso al informe comparativo que te enviamos desde Aseguramos Online ya estarás listo para suscribir la póliza de decesos que te resulte más interesante.
No tienes ningún compromiso. Nuestro comparador de seguros de decesos es solo una herramienta de información para ponértelo un poco más fácil. Puedes contactar directamente con la empresa aseguradora que creas conveniente, o utilizar el link de nuestra web para dirigirte a su página y solicitar desde allí la contratación de tu seguro de decesos.
Recuerda que, durante el proceso de contratación, la aseguradora te solicitará algunos datos básicos que conviene tener ya a mano:
- DNI del tomador de la póliza y de cada uno de los asegurados
- Fechas de nacimiento
- Dirección del domicilio habitual
- Cuenta bancaria para domiciliar los pagos
Normalmente, la información requerida se puede subir directamente a la plataforma de la aseguradora para aligerar los trámites. En apenas un par de días tendrás toda la documentación de tu póliza disponible, conforme exige la normativa, para que disfrutes de inmediato de todas sus coberturas.
Preguntas frecuentes sobre seguros de decesos
¿Para qué sirve la antigüedad en un seguro de decesos?
El derecho de antigüedad es un concepto especialmente importante en las pólizas de deceso con prima nivelada. Así como en los seguros de prima natural el precio aumenta conforme pasan los años, en un seguro de prima nivelada el precio es constante. La antigüedad del seguro no añade coberturas adicionales a la póliza. Simplemente sirve como fecha de referencia para congelar el coste de esta en el momento de su suscripción.
¿Qué es prima nivelada en el seguro de decesos?
La prima nivelada o prima constante en el seguro de decesos es el precio que el tomador va a pagar por su seguro durante la vigencia de este. Se trata de una cantidad fija e invariable que no se verá afectada ni por el envejecimiento del asegurado (derecho de antigüedad) ni por el aumento del riesgo asegurado (el tomador tiene cada vez más edad). No obstante, sí se contemplan las actualizaciones de precio vinculadas a los cambios en el IPC.
¿Cómo saber si un fallecido tiene seguro de decesos?
Puede darse la circunstancia de que la persona fallecida no hubiera comunicado a sus familiares la suscripción de un seguro de decesos. Para salir de dudas y beneficiarse de las coberturas de esta póliza en caso de que exista, es necesario realizar una consulta en el Registro de contratos de seguros de cobertura de fallecimiento, dependiente del Ministerio de Justicia. Para ello es obligatorio esperar 15 días desde el momento de la defunción antes de dirigirse a dicho Registro, bien de manera presencial en la Gerencia Territorial de Justicia, bien a través de la sede electrónica en su página web.
¿Qué pasa si no tienes seguro de decesos?
Cuando una persona fallece, los familiares o herederos deben hacerse cargo de los gastos del sepelio y de los trámites administrativos que este conlleva. En caso de que no exista un seguro de decesos, estos gastos funerarios se convierten en una carga económica importante que, sumada al duelo del momento, complicarán aún más la situación. El coste de estos servicios suele ser elevado, pudiendo comprometer la estabilidad financiera de los familiares del difunto.